sábado, 14 de mayo de 2011

Sola, antes que mal acompañada


La decepción entra y sale de nuestra vida como si nada. Como si viviera con nosotros y andara en zapatillas por casa. La experiencia dice que es así, y que es de una en un millón la probabilidad de que exista una excepción que confirme la regla. Por eso, hay que estar a prueba de balas, avisar a tu corazón de todo esto. Aunque él aprende rápido, y llegará un momento en el que las decepciones le parezcan superficiales. Las personas te disparan, incluso aquellas con las que has vivido toda una vida. Así que tomas decisiones. Eliges  alejarte de esas personas, aunque eso suponga hacerte amiga de la soledad., tan sólo por un tiempo.

3 comentarios:

  1. ¿Conocía al genio que escribió esto y no lo sabía? :o Grande Lara, GRANDE.

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  2. ooooois, muchisísimas gracias Carla!
    GRANDE TÚ (L)

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  3. Muy cierto... y es que muy pocas personas merecen la pena verdaderamente... ;)

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